lunes, 4 de agosto de 2008

ALTERACIONES EPECIFICAS EN ALGUNOS VEGETALES

FRUTAS DE PEPITA: estas frutas que, en la mayoría de los países de clima templado, son las más importantes y que en la producción frutera mundial ocupan el segundo lugar, inmediatamente detrá de las uvas, son atacadas por diversos agentes productores de podredumbre, entre ellos se han señalado 42 géneros distintos de hongos, con un número de especies muy superior. Las frutas de pepita almacenan en lugares fríos pueden ser atacadas por especies psicrófilas. Con frecuencia los hongos patógenos forman en el interior de la fruta un micelio voluminoso abundante, a la vez que la fruta adquiere color pardo; el micelio aéreo, con esporas y más o menos coloreado, se desarrolla en la piel de la fruta generalmente más tarde. En lo que se refiere a resistencia al ataque microbiano existen grandes diferencias de una variedad de frutas a otras. Entre las variedades de manzanas relativamente resistentes, deben citarse las siguientes: Jonathan, Notario, Blenheim, Renette, Baūmanns Renette y Golden Delicious. Por el contrario son frecuentes las podredumbres de almacenamiento en las Boskoop, Cox Orangen, Renette, Goldpärmane y Landsberger Renette. Entre las podredumbres más difundidas destacan “podredumbre parda”, “podredumbre del corazón”, “podredumbre amarga”, “podredumbre verde”, “moteado o costra de almacenamiento” y “ podredumbre por Phytophthora” o “mildiu de las frutas”. Además, durante el almacenamiento por causas fisiológicas, pueden originarse diversas alteraciones en la fruta, como “pardeamiento del corazón” de la pulpa y de la piel, “humedad” y manchas como lentejas. La podredumbre húmeda es rara en las frutas de pepita.
Las peras son atacadas por el mismo parásito o por especies muy similares a las que afectan a la manzana; debido a su mayor contenido azucarado son más sensibles que las manzanas.



FRUTAS EN BAYA: Las frutas en baya son muy sensibles a los hongos y a causa de su escasa resistencia frente a los parásitos de la podredumbre sólo pueden almacenarse un tiempo breve. En las fresas el moho que causa más daño es el productor de la podredumbre gris (Botrytis cinerea). Se propaga de fresa a fresa con gran rapidez.
Tambien es frecuente Rhizopus que origina la podredumbre húmeda. Las fresas atacadas por Rhizopus nigricans y especies afines aparecen cubiertas de hifas de color gris sucio con numerosos esporangios grises o negros. La podredumbre por Rhizopus se diferencia de la del Botrytis porque su micelio aéreo es menos denso y más alto, destacándose en las frutas cuya superficie es viscosa y húmeda y porque sus esporangios son pulverulentos. Phytophthora cactorum, agente de la podredumbre coriácea o mildiu, también ataca a las fresas. Las especies de Alternaria que por poseer esporas pardo-oscuras a negras, se incluyen entre los Demaci´ceos, causan arrugamiento y aparición de color pardo en el arándano. En las bayas azules (arándano, mirtilo) pueden desarrollarse Gloeosporium fructigenum y G. Album que forman una especie de pequeñas pústulas rojizas o blancas en las manchas pardas hundidas de la superfcie de la fruta. En las frambuesas os hongos del género Cladosporium originan esporodoquios; el micelio varía de verde oscuro a verde oliváceo. Las uvas son atacadas también por otros hongos como Alternaria, Botrytis, Rhizopus y Penicillium sp. Plasmopara vitícola, el parásito del mildiu, además de a las uvas, ataca especialmente a la vid. En las frutas de baya aparecen con mucha frecuencia levaduras que por un lado son beneficiosas, como en la fabricación del vino, y por toro perjudiciales, como en la fermentación de frambuesas en las que originan una alteración típica. En las frutas fermentadas se aprecia fácilmente un “olor a espíritu del vino”.


FRUTOS CÍTRICOS

los daños más importantes en CITRTICOS se deben a diversa especies microbiana y a dos especies de Penicillium muy similares: Penicillium digitatum es el responsable de la podredumbre verde de los limones. Las frutas atacadas al principio presentan en la piel zonas circulares de color blanco, debido al micelio superficial, que más tarde y a parir del centro aparece cubierto de una capa pulverulenta de esporas de color verde oliva intenso. La podredumbre húmeda se extiende muy rápidamente desde los focos iniciales y si la temperatura de almacenamiento es de unos 20°C, las frutas se descomponen totalmente en 3-4 días. Como consecuencia de la degradación de la pectina de las laminillas intermedias se ablandan los tejidos de la fruta. Cuando los limones están sano las laminillas son firmes y los gajos de la fruta permanecen firmemente adheridos unos a otros, mientras que en los enfermos se separan con facilidad. La corteza que inicialmente era firme, se convierte en esponjosa y se desprende.
La podredumbre húmeda debida a Penicillium italicum, que raramente ataca a los limones sino preferentemente a las naranjas, se diferencia de la podredumbre verde en que la zona con esporas es de un color que varía entre gris y verde azulado. Por ello se le denomina también podredumbre azul.
Aparte de estas especies de Penicillium, que son agentes de podredumbre muy peligrosos que causan daños muy graves, en las frutas citricas aparecen en ocasiones especies de Phytophthora Sclerotinia, Geotrichum, Fusarium, Phomopsis y Diplodia. Los últimos causa la podredumbre del nacimiento del tallo. Alternaria citri es el parásito más temido de las uvas en las que causa podredumbre húmeda, atacando también a las naranjas.
Las alteraciones producidas por heladas en los limones sensibles al frío se muestran externamente en forma de manchas pardo-amarillentas a pardas, que aumentan progresivamente de tamaño y que no pueden confundirse con las originadas por los microorganismos. En los plátanos, más sensibles a la presión, los ataques microbianos tienen menos importancia que los pardeamientos y ennegrecimientos enzimáticos; en el ablandamiento de la fruta juegan un papel importante las temperaturas del almacenamiento demasiado altas.